Curar un tatuaje correctamente es crucial para garantizar una cicatrización adecuada, evitar infecciones y preservar los colores y detalles del diseño. A continuación, te doy instrucciones detalladas paso a paso sobre el cuidado de un tatuaje nuevo:
Fase 1: Primeras 24 Horas
1. Protección inmediata
Cuando termines tu sesión, el tatuador cubrirá el tatuaje con un vendaje o film plástico. Esto protege la piel recién tatuada de bacterias, suciedad y el contacto con la ropa.
El tiempo que debes dejar este vendaje varía según la recomendación del tatuador:
Film plástico: 2 a 4 horas máximo.
Vendaje especial tipo Dermalize/Saniderm: Puede mantenerse hasta 24-48 horas si el tatuador lo indica.
2. Retiro del vendaje y limpieza inicial
Lávate bien las manos con jabón antibacterial antes de tocar el tatuaje.
Retira el vendaje con cuidado. Si está pegado, humedécelo con agua tibia para evitar dañar la piel.
Lava el tatuaje suavemente con agua tibia y un jabón neutro (sin fragancias ni alcohol). Usa solo la yema de los dedos; no utilices esponjas ni toallas.
Seca el tatuaje dando toques suaves con una toalla de papel o una toalla limpia de algodón. No frotes.
3. Aplicación de crema cicatrizante
Usa una capa muy fina de crema recomendada por tu tatuador (Bhom, Sangre de Dragon). No apliques una cantidad excesiva, ya que podría obstruir la piel y retrasar la cicatrización.
No cubras el tatuaje nuevamente a menos que el tatuador lo indique.
Fase 2: Primeros 3 a 7 Días – Cicatrización Inicial
1. Limpieza regular
Lava el tatuaje 2 o 3 veces al día con jabón neutro y agua tibia. Asegúrate de secarlo con toques suaves.
2. Hidratación
Aplica crema cicatrizante en capa delgada después de cada lavado. No uses vaselina ni productos grasosos que impidan que la piel respire.
3. Evitar el roce y la humedad
Usa ropa holgada de algodón para evitar la fricción. No toques el tatuaje con las manos sucias. Evita el contacto con superficies sucias o expuestas a gérmenes.
4. Lo que debes evitar:
No rasques ni arranques las costras. Durante estos días, el tatuaje puede formar costras o descamarse. Esto es parte del proceso de curación. Si arrancas una costra, podrías dañar el diseño.
No sumerjas el tatuaje en agua. Evita piscinas, jacuzzis, el mar y baños largos. Solo duchas rápidas.
No expongas el tatuaje al sol. La luz solar puede desvanecer los colores.
Fase 3: Segunda Semana – Descamación y Comezón
Es normal que la piel empiece a pelarse y pique. No rasques el tatuaje; puedes dar golpecitos suaves alrededor si la picazón es intensa.
Continúa lavando e hidratando el tatuaje hasta que la piel deje de descamarse.
Si notas que la piel está muy seca, usa una crema sin perfume para aliviar la tirantez.
Fase 4: Tercera y Cuarta Semana – Cicatrización Profunda
Para este punto, el tatuaje se verá curado en la superficie, pero la piel aún se está regenerando en capas más profundas. Sigue usando protector solar (FPS 50) si el tatuaje va a estar expuesto al sol. Continúa hidratando la piel con una crema ligera sin perfumes.
Cuidados a Largo Plazo
Hidratación diaria. Una piel bien hidratada mantiene los colores y la nitidez del tatuaje. Protector solar siempre. La exposición al sol es la causa principal del desgaste del tatuaje. Evita productos con alcohol. Pueden resecar la piel y afectar los colores.
Señales de Alarma – Cuándo Consultar a un Médico
Si notas alguno de estos síntomas, consulta a un médico:
Infección: Enrojecimiento extremo, hinchazón, secreción amarillenta o verdosa con mal olor, fiebre.
Reacción alérgica: Sarpullido, picazón intensa o inflamación fuera del área tatuada.
Cicatrización anormal: Si la piel desarrolla queloides o áreas con pérdida de tinta.
Siguiendo estos pasos, tu tatuaje sanará correctamente y conservará su apariencia por años.